domingo, 13 de febrero de 2011

DE DIOSES Y DE HOMBRES ("Des hommes et des dieux", 2010)

El director francés Xavier Beauvois decide acometer la difícil tarea de describir, con apenas unos trazos de finísima pincelada, unos personajes de gran complejidad y humanidad en su última película, “De dioses y de hombres”. Pocas palabras, pequeños gestos, le son más que suficientes para retratar a estos monjes trapenses basados en personajes reales que vivieron en los años 90 en el monasterio de Nôtre Dame de l’Atlas, en Thiberine (Argelia). La película es un relato profundo y místico en el que la convivencia y el respeto son protagonistas junto a  los miembros de esta comunidad magníficamente interpretados por un grupo de actores acertadísimo. Estos hombres se enfrentan a una situación muy dura cuando problemas entre el gobierno local y grupos extremistas desencadenan una ola de violencia que amenaza su seguridad. Ellos afrontan la situación con mucho miedo pero también con un increíble coraje y mucha dignidad. Como en “El lago de los cisnes”, y escuchando su melodía, deciden luchar para que sus espíritus permanezcan juntos para siempre, y morir como han vivido: siendo la rama en la que se apoyan los pájaros de su entorno.
La película, con varios premios y múltiples nominaciones, entre ellos el importante Gran Premio de Honor de Cannes, construye sin artificio melodramático una isla de  espiritualidad cisterciense que intenta sobrevivir en un mar musulmán. Absurdos son la vida, la lucha religiosa o política, el martirio… quizás la reflexión de uno de estos personajes, Christian, sea certera, al margen de creencias religiosas o no. Quizás nada tenga sentido en la vida o en la muerte si no el amor, el amor al prójimo o a la propia obra. Quizás todo consista en amar.

1 comentario:

  1. no se qué decir, pero algo me abre los ojos y no he visto la película...

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